El beneficio oculto de la dieta cetogénica
Mejora tu estabilidad neuronal
Quizá has escuchado sobre la dieta cetogénica, un plan alimenticio bajo en carbohidratos y dominante en grasas, que ayuda a quemar grasas de manera eficaz. Muchas personas ya han experimentado los numerosos beneficios comprobados para la pérdida de peso, la salud y el rendimiento, tal y como demuestran numerosos estudios por diversas instituciones como el New England Journal of Medicine 2008 y el Annals of Internal Medicine 2014; sin embargo, hay un beneficio poco mencionado: la estabilidad de la red neuronal.
“Estabilidad de la red Neuronal”
El artículo titulado "La dieta modula la estabilidad de la red cerebral, un biomarcador del envejecimiento cerebral, en adultos jóvenes", habla sobre este concepto, definiéndolo como: la capacidad del cerebro para comunicarse entre sus regiones. Una mayor estabilidad de la red indica que todas las diferentes regiones del cerebro están bien conectadas y pueden trabajar juntas de manera eficiente para mantener la actividad cognitiva. Dada la dieta alta en grasas, los propios cuerpos cetónicos (productos de desecho de las grasas. Se producen cuando el cuerpo utiliza las grasas en lugar de los azúcares para generar energía) aumentan la estabilidad de la red y, por lo tanto, protegen contra el envejecimiento cerebral y el riesgo de desarrollar enfermedades como el Alzheimer.
“¿Que nos dice el estudio?”
Para examinar el posible impacto de las cetonas en la estabilidad de la red cerebral, proveniente de una dieta alta en grasas y baja en carbohidratos o de un suplemento de ésteres de cetonas, los investigadores realizaron dos experimentos.
En el experimento 1, doce participantes sanos (edad promedio = 28 años) se sometieron a exploraciones cerebrales para medir la estabilidad de la red en tres ocasiones distintas: después de un ayuno nocturno; después de comer una dieta estándar y después de comer una dieta cetogénica alta en grasas y baja en carbohidratos. En comparación con el control rápido durante la noche, la dieta estándar disminuyó la estabilidad de la red, mientras que la dieta cetogénica aumentó la estabilidad de la red. Esto sugiere que las dietas occidentalizadas estándar altas en carbohidratos aceleran el envejecimiento cerebral, mientras que las dietas cetogénicas protegen contra el envejecimiento cerebral.
El experimento 2 se llevó a cabo para aislar los efectos de la glucosa frente a las cetonas como combustibles en la estabilidad de la red. En este experimento, treinta participantes sanos (edad promedio = 29 años) se sometieron a escáneres cerebrales para medir la estabilidad de la red después de beber una bebida con glucosa o una bebida con cetonas isocalóricas. Una vez más, los datos fueron claros: la glucosa disminuye la estabilidad de la red y las cetonas aumentan la estabilidad de la red, lo que sugiere que un exceso de azúcar acelera el envejecimiento cerebral, mientras que las cetonas pueden proteger contra el envejecimiento cerebral.
Finalmente, se notó que la estabilidad de la red comienza a disminuir décadas antes de que surjan los síntomas del deterioro cognitivo. La desestabilización comienza a acelerarse a los 47 años y alcanza su punto máximo a los 60. Y uno de los elementos que hace que este proceso se acelere aún más, es el azúcar. Una dieta alta en azúcares, especialmente los refinados, es dañina para la estabilidad del rey, y como consecuencia, un deterioro cognitivo pronunciado.
“La felicidad es la más alta forma de salud.
DALAI LAMA”
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