Serums, ¿de día o de noche?
Los serums concentran en pocas gotas una gran cantidad de activos beneficiosos para la piel. Pero, ¿cuándo es mejor aplicarlos, de día o de noche?
El protocolo de la belleza es algo tan importante como su efectividad y además de conocer su formulación debemos saber cuándo aplicarlo, si de día o de noche, antes o después de la crema hidratante.
El éxito de los serums radica en que concentran en pocas gotas gran cantidad de activos beneficiosos para nuestra piel. Se suelen aplicar tras su limpieza y antes de cualquier crema, no siendo nunca un sustituto de éstas pero sí un interesante complemento con el que conseguir un rostro más luminoso, hidratado y saludable, explica Joaquín Piral, de la firma cosmética suiza Wherteimar.
Según los estudios de la firma, cuando mejor actúan los serums es durante la noche, “ya que el cuerpo se regenera y también la piel”, un órgano más del mismo.
DIFERENTES PROPIEDADES.
Piral apunta que hay que diferenciar bien entre las propiedades de un serum, una crema o un booster. El primero tiene una textura diferente, más ligera, acuosa y potente por su capacidad de concentración.
“Los serums son más fáciles y rápidos de absorber que las propias cremas, además de llegar a las capas más profundas de la piel. Lo bueno es que con dos o tres gotas que utilicemos, ya es suficiente, hay que recordar que más cantidad no significa que actúe con más intensidad.
La piel, como órgano en constante evolución, se regenera durante la noche mientras dormimos, pues cuando descansamos se calma e incluso se nutre, de ahí la importancia de aplicar los serums hidratantes. El cuerpo y nuestra piel se “resetean” aproximadamente desde las 23 horas hasta las 04 horas, incrementando la “irrigación sanguínea en nuestra dermis, por lo cuál es el momento más oportuno de aplicar no sólo cremas, también serums que en el caso del verano tengan un potente efecto extrahidratante”, según el responsable de Wherteimar.
“Al levantarnos, aunque podemos utilizar un serum, quizás la crema no es tampoco mala solución, si bien se dirige a las capas superficiales y tarda más en hacer su efecto, por supuesto con un buen factor SPF que nos ayude a protegernos de los rayos solares”, añade Pinar.
Entre las propuestas que Pinar recomienda está Hydrasens, para proteger, calmar, hidratar y regenerar, con una formulación desarrollada para todo tipo de pieles, especialmente aquellas más sensibles o congestionadas.
Los efectos que se consiguen son los siguientes: sensación de frescor, suavidad y relajación, acción descongestiva y tonificante, acción hidratante, acción antiinflamatoria, acción antiflogística y regeneradora del tejido cutáneo. Presenta una combinación de principios activos que restauran la barrera hidrolipídica natural. “De esta forma, la piel adquiere más fortaleza y resistencia”, argumenta Pinar.
La noche es también el momento ideal que propone L’Occitane para aplicar su aceite en serum Reset Siempreviva para recuperar la piel del estrés, el sol y la polución, después de una refrescante limpieza. Tres gotas extendidas con suavidad, alivian la tensión de rostro, cuello y sienes con un leve masaje.
EL PODER DE LA VITAMINA C.
Con el poder de la vitamina C como bandera, Medik8, propone un serum con un extra de esta vitamina, Super C30, que tiene como objetivo mejorar la luminosidad y combatir los signos de envejecimiento, con una fórmula que contiene ácido ascórbico ultra estable, que ayuda a proteger la piel del daño ambiental y del sol.
Entre sus propiedades, aumenta los niveles de colágeno para suavizar finas líneas y arrugas, además de aclarar la tez. Recomiendan su uso tras la limpieza de la mañana, aplicando cuatro gotas en rostro, cuello y escote y dejar que se absorba antes de extender la crema hidratante.
La novedad en los serums no solo proviene de su formulación sino de su textura. Es el caso de Hyaluron&Collagen Nano Spray de M2 Beauté, en formato bruma, que precisa solo de tres pulverizaciones tres veces al día para hidratar, energizar y reparar la piel con una fórmula a base de ácido hialurónico, colágeno tipo 1 y elastina.
Por Inmaculada Tapia.
EFE REPORTAJES