Lauren, medio siglo del estilo americano
Auténtica leyenda de la moda, Ralph Lauren acaba de celebrar las bodas de oro de su primera colección, un diseñador que ha definido el estilo americano en todo el mundo.
Camisas de franela, faldas y pantalones vaqueros, vestidos de terciopelo, abrigos de paño, estampados tribales, botas estilo vaquero, jerséis de punto, cazadoras de cuero, capas y sensuales vestidos que simulaban colchas de retales, son algunas de las prendas que definen el estilo de Polo Ralph Lauren.
Desde su nacimiento, en 1968, esta firma ha querido rendir tributo a las raíces americanas combinando prendas de trabajo, sastrería tradicional y piezas de aire deportivos.
Polo Ralph Lauren tiene identidad propia, respira libertad y sofisticación, una marca en la que son habituales los sombreros de cowboy, los gorros de lana, los chalecos acolchados combinados con corbatas, los bombines y las gorras gatsby.
Aunque su prenda mítica es el polo -una pieza atemporal de aire deportivo inspirada en la que llevaban los jugadores de polo- que le ha permitido construir un imperio que, a día de hoy, abandera el sueño americano.
La paleta cromática tiene mucho que ver en la narración de esta fabulosa historia de la moda. Los colores vibrantes y luminosos son el denominador común de todas sus colecciones, unas tonalidades y combinaciones de tono que son muy reconocidas.
Ralph Lifshitz, más conocido como Ralph Lauren, nació en Nueva York (Estados Unidos) en 1939. De origen judío, se crió en el barrio neoyorquino del Bronx. Cuando era un niño, alguien le pregunto qué quería ser de mayor, él contestó: "millonario".
Y se puso a ello. Tras estudiar diseño, en 1967, dio a conocer su marca "Polo" a través de la comercialización de corbatas. Un año después, presentó al público sus diseños en esas prendas, coincidiendo con su ruptura con la casa textil Brooks Brothers en la que Ralph Lauren comenzó, con 24 años, como vendedor, sin ninguna experiencia en el sector textil. Concretamente fue en la tienda de Madison Avenue.
Un decisión que le llevó a abrirse camino en la moda. Cinco años más tarde, con gran olfato para descubrir los gustos de la sociedad de americana, Ralph Laurent presentó su primera colección de ropa femenina.
FIRMA DE ESTILO CLÁSICO Y ATEMPORAL.
Desde entonces esta firma ha ido a más, y bajo sus siglas RL venden ropa de hombre, de mujer y de niño, complementos, perfumes, productos de decoración o accesorios para mascotas.
Siempre ha apostado por un estilo clásico, atemporal y con cierto porte aristocrático, en el que se conjuga elegancia y libertad.
Ahora, esta icónica firma celebra su 50 aniversario. "Para esta fecha quería crear y compartir una pasarela profundamente personal y que representara la suma de los estilos en los que siempre he creído: personal, auténtico y eterno, en un lugar tan neoyorquino por excelencia y tan especial para mí: el Central Park", dijo el modisto en un comunicado enviado a la prensa.
No hay muchos diseñadores que puedan presumir de celebrar sus bodas de oro en la moda, un mundo que se renueva cada seis meses en función de los gustos y la inspiración de los directores creativos, pero donde Ralph Lauren no ha seguido esa estela.
Ha preferido ser fiel a sí mismo y proponer prendas que venden un estilo de vida, como las camisas de algodón blanco, jerséis de colores anudados a la cintura y pieles bronceadas.
Su logotipo, jugador de polo a lomos de un caballo, es reconocido en todo el mundo. Un sello empresarial que tomó un gran impulso tras diseñar el vestuario de la película "The Great Gatsby" en 1974.
Tres años después, Diane Keaton luce un "total look" con sello Ralh Lauren en el filme "Annie Hall", un atuendo que se convierte en un emblema del nuevo estilo norteamericano.
En 1986 se convirtió en el primer diseñador en aparecer en la portada de la revista "Forbes" y convierte la mansión Gertrude Rhinelander Waldo House de corte renacentista francés, ubicada en el 867 Madison Avenue de Manhattan, Nueva York, en el buque insignia de la marca.
Ralph Lauren, casado y con tres hijos, en 2015 deció dejar su cargo como consejero delegado de su propia marca, una firma que encierra el más puro estilo americano del siglo XXI.
Por Carmen Martín.
EFE/REPORTAJES
Carmen Martín